Si bien las organizaciones sindicales del comercio, aerolíneas e industrias, respaldaron los cambios advirtieron que hay ciertos temas no incluidos como la negociación por rama y la potestad del empleador para despedir.

Amplio fue el apoyo de diversos sindicatos de trabajadores a los diez puntos que contempla la reforma laboral ingresada al Congreso.

La mayoría de los representantes de mega sindicatos del comercio, aerolíneas, industria, banca y minería, consideran que con esta iniciativa Chile avanzará a niveles de otros países de la región, aunque  acusan falta de otras medidas las cuales -dicen- “deben ser abordadas cuanto antes”.

Lo que faltó

Para muchos de los consultados que no se incluyera la eliminación del artículo 161 del Código Tributario es uno de los temas pendientes que dejó la propuesta. Este artículo permite los despidos por necesidades de la empresa, sin mayor detalle.

El presidente de la Confederación Nacional de Trabajadores del Comercio, Producción y Servicios (Conatracops), Claudio Sagardias, indicó que “en la medida que los empresarios tengan la potestad de poder despedir por necesidades de la empresa cuando se les antoja, es muy poco lo que se puede avanzar”, comentó.

Agregó que “si vamos a adoptar una buena reforma de negociación colectiva, y  después la empresa dice voy a echar a esta gente porque ganó más, eso nos complica. No se avanza”, acotó.

Se sumó  la mirada del vicepresidente de Holding Latam, Darío Castillo, quien destaca que “esa facultad del empresario de desvincular cuando quiera y sin motivo y sin razón, le ha dado una carta blanca por años al empleador que es necesario cambiar pronto”.

También Jorge Fuentealba, presidente del Sindicato de Trabajadores de BancoEstado, entidad que tiene un 98% de empleados afiliados postuló que “temas como negociación por rama o el artículo 161 faltaron, este último se ha prestado para prácticas antisindicales y ataques a los trabajadores”.

Pese a esto, destacó que esta agenda laboral “viene a resolver gran parte de los problemas históricos ”que han existido en el país.

Manuel Muñoz, de Minera Collahuasi, en tanto, observó que el Gobierno “tenía” las herramientas para profundizar todavía más la reforma laboral y denuncia que dejó afuera muchas cosas.  “Por ejemplo los sindicatos chicos no salen fortalecidos. Y hay cosas que faltan como la negociación por rama; siempre va a ser una buena alternativa en términos generales, porque nos permitiría equiparar fuerzas e incorporar a trabajadores subcontratistas”, precisó.

El presidente de Sinami (Sindicato interempresas del montaje industrial) Miguel Gonzaléz, en tanto abordó  un aspecto no discutido mayormente en la preparación del proyecto:  hacer más transparente los sindicatos. “Un tema de fondo es darle el suficiente poder a la organización sindical para que cada organización negocie las cosas ad doc con su empleador, no limitarlas. La ley debe ser en términos de conceptos no en términos de cómo tienes que hacer las cosas. Y eso se puede lograr en la medida que las organizaciones sindicales sean fuertes, serias y preparadas”, aseguró.

Lo destacado

Para la totalidad de los consultados, la propuesta significa un “avance”, con matices.

Manuel Muñoz, presidente del sindicato Minera Collahuasi, indicó “obviamente todo lo que signifique un cambio y que tienda a mejorar la condición de los trabajadores en equipar  beneficios y utilidades  es bien visto por el mundo sindical”.

Destacó el fin del reemplazo en huelga, ya que “eso complejizaba la materialización de una huelga. Es un gran avance”.

Darío Castillo, vicepresidente de Holding Latam, en tanto, aseguró que para su entidad hoy “es un buen momento”, pese a que los empresarios “la van a criticar todo el rato, porque nos va a dejar en similares condiciones  para  negociar”.

El dirigente, que lidera 6 sindicatos con cerca de 3 mil trabajadores, acotó que “mejora la desigualdad, sobre todo en empresas grandes, donde hay muchos grupos asimilados, que terminan perjudicando a los sindicatos. Ahora se hizo  un guiño al empresariado que estaba pidiendo hace tiempo la flexibilidad laboral”, precisa.

Otra mirada entregó Arlette Gay, miembro del comité de la Federación Internacional de Trabajadores del Transporte (ITF). “Lo único que viene a hacer esta iniciativa es normalizar el tema laboral. No es más que eso. Los mismos capitales grandes que están en Chile viven cotidianamente con esta realidad en otros países y siguen invirtiendo y dando trabajo y negociando con su sindicato y no pasa nada. La pataleta que están haciendo acá (empresarios) no tiene ningún sentido”, acotó.